jueves, 10 de octubre de 2013

El final do Camiño " de Pedrouzo a Santiago"

Para poder llegar a la misa del Peregrino, que es a las 12 del mediodía, hemos comenzado a andar a las 6,15 AM. La travesía hasta el amanecer, que aquí no es antes de las 8, ha sido bastante especial, pues con la sola luz de una linternita y sin la ayuda de la luna hemos tenido que atravesar bosques muy tupidos ¡ha sido toda una aventura! En Lavacolla, sobre las 9, nos hemos tomado un "pequeño" piscolabis muy liviano. Ha sido en el bar Botana, donde se vanaglorian de hacer los bocadillos más grandes del Camino. Comprobadlo vosotros mismos.


 Antes de llegar a Monte do Gozo hemos pasado por un bosque bastante singular.
 
Después de 20 km de andadura, hemos llegado a Monte do Gozo desde donde hemos contemplado por primera vez la ciudad de Santiago.

5,9 Km después hemos alcanzado nuestra meta, la Plaza del Obradoiro. Con el sonido de una gaita de fondo, han estallado en nosotros una mezcla de muchos sentimientos que se nos han ido impregnando durante el Camino y que no hemos podido contener en esta maravillosa plaza.

De ahí a la misa del Peregrino, muy emocionante también, el reconfortante abrazo al apóstol y visita a su cripta.

 
Al fin, hemos conseguido nuestra compostelana con nuestro nombre en latín. Como colofón a este viaje que hemos realizado con vosotros, queremos hacer mención de aquellos amigos que nos ha dado el Camino, empezando por Carmen, esa madrileña afincada en Marbella; Juan Jose, navarrico y María, vallisoletana, pareja que nos "adoptaron" como sus hijos en 2 etapas; Leo e Inma estupendos chicos de Málaga, que estuvimos juntos en una etapa y nos han recibido hoy en Santiago. Y, por supuesto, nuestro mayor cariño, para Isaías y Vane, de Almayate (Málaga) con los que hemos hecho las tres últimas etapas y son una excelente compañía. Un recuerdo cariñoso para todos aquellos con los que hemos coincido a lo largo del Camino. Para finalizar quiero expresar mi mayor orgullo y amor a mi infatigable compañera en esta aventura de 8 etapas, en las que hemos reído, llorado, disfrutado y, también, sufrido pero siempre hemos estado unidos. GRACIAS, LUISA!!!!!!

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